No soy el primero ni seré el último en recibir una solicitud de contacto en Linkedin, no por el interés de mi perfil -aunque el modus operandi siempre es el mismo: te hacen la pelota aduciendo que tu perfil es interesante-, sino por un interés comercial puro y duro.
En principio no tendría nada de especial la cosa, salvo por dos detalles:
1) Tener que explicar a alguien que no te interesan unos servicios no solicitados, te hace perder el tiempo.
2) Das por sentado que esa persona, al menos, te respeta.
Me he decidido a escribir este post no sólo porque cada vez se producen más intentos de contacto de “profesionales” que saben mejor que tú “cómo mejorar tu negocio”, pero que por alguna razón misteriosa, no son capaces de aplicar sus arcanos conocimientos para mejorar el suyo.
También lo hago porque el viernes 22 de abril recibí uno que supera todo lo conocido. Se trata de una persona que contactó conmigo en noviembre de 2021. Será mejor que lo leas. Copio y pego:
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PRIMER MENSAJE
—–17 nov 2021 “JFM QUIERE CONECTAR CONTIGO”
—–JFM 10:49
-¡Hola Juan Carlos! He visto que eres responsable de una agencia de CÓMUNICACIÓN. He estado echando un ojo a tu perfil y me parece muy interesante. ¿Conectamos? 🙂
TRAS CONECTAR, RESPONDO
—–Juan Carlos Ayuso 10:50
-Hola, JFM: Agradezco tus palabras pero no estoy interesado en partners de desarrollo. Si hay algo que pueda hacer por tu marca o comunicación, no dudes en contactar de nuevo. Un cordial saludo,
Juan Carlos Ayuso
—–18 nov 2021 JFM ha enviado el siguiente mensaje a las 17:44
-Que bueno Juan Carlos! gracias por tu respuesta.
6 MESES DESPUÉS -EL 22 DE ABRIL 2022- RECIBO UNA “NUEVA” SOLICITUD DE CONTACTO ¡DE LA MISMA PERSONA!
“JFM QUIERE CONECTAR CONTIGO”
Tras comprobar que dicha persona YA ESTÁ en mis contactos -conversación anterior incluida-, le respondo
Juan Carlos Ayuso 14:19
Vamos a ver, JFM: El problema de tantos como tú que contactáis para vender una moto y después, si te he visto no me acuerdo, queda patente en este nuevo intento por tu parte.
Pone de relieve que tras, hacerte saber en nov-21 que no me interesaban tus servicios, me borraste de tus contactos.
Vamos, que, interés-interés en contactar conmigo no tienes ninguno.
Yo, en cambio, no borré el tuyo. Lección que seguro, te va a venir muy bien para el futuro. Por no extenderme más, simplemente espero tu disculpa.
————9 horas después SIN RESPUESTA POR SU PARTE, AÑADO
Juan Carlos Ayuso 21:53
Bravo. Nueve horas después, tu soberbia impide tu disculpa. Gracias por darme un excelente tema para compartir en un post.
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Para quienes aún estén pensando que un comportamiento así es legítimo -desde un punto de vista comercial-, siento contrariarles. ¿Y la educación, dónde la dejamos? Nunca es legítimo, molestar o hacer perder el tiempo.
Linkedin no es una plataforma de venta online -al menos que yo sepa-. Contesto a TODO el mundo que se pone en contacto conmigo por cortesía. Aceptar servicios no solicitados no entra en mis planes, pero, respondo con respeto. En ocasiones, aprovecho para hacerles reflexionar, ofreciendo en la respuesta mis servicios.
Ahora bien, revela -cero profesionalidad- ponerte en contacto con alguien; al que has borrado de tus contactos cuando no ha atendido a tu ventas de humo para, volver a contactar (cuando ya se te ha olvidado su nombre)… ¡seis meses después! Por no hablar de las faltas de ortografía o los emoticonos chulis que gastan algunos.
Por último: equivocarnos nos ayuda a crecer. Incluso, meter la pata nos ayuda a crecer. Siempre reivindico el derecho a equivocarnos.
Ahora bien, si nos equivocamos, es legítimo disculparse (mejor diría yo, -obligatorio-, no opcional como algunos piensan).
Es el único recurso que nos queda para tratar de enmendar una salida de tono. No hacerlo significa que vas de prepotente o eres de los que piensan que mejor meter la pata a tener que disculparse. Un cretino de marca mayor que queda retratado en el acto.
Por otro lado, comprendo que el vende-humos de esta historieta no respondiese a mi último mensaje.
Si aún le queda un poquito de vergüenza, cuando haya exclamado ¡trágame, tierra! su deseo ha debido hacerse realidad.