A lo largo de unos siete años, la Oficina Pro Captivi de Alfonso XIII dio respuesta a más de medio millón de solicitudes.
Los resultados de su actividad fueron extraordinarios.
Diversas fuentes coinciden en afirmar que la Oficina ayudó a unos 122.000 prisioneros belgas y franceses, 7.950 del Reino Unido, 6.350 italianos, 400 portugueses, 350 americanos y 250 rusos.
Cuando se trata de repatriaciones las cifras llegan a 70.000 civiles a los que se auxilió para regresar al hogar evitando la muerte en campos de concentración, junto a otros 21.000 prisioneros enfermos…»